A través de esta lectura, reconozco que el corazón por si solo puede ser peligroso, por esa razón, mi corazón debe ser sometido a la voluntad de Dios, y debemos entregárselo al Señor, solo así, podrá tener emociones firmes, guiarnos según a voluntad de Dios, y evitar engañar. Por eso decía el proverbista.. “Sobre toda cosa guardada, guarda tu corazón por que de el mana la vida..” y el otro pasaje es “Donde esta tu tesoro allí estará tu corazón”, por lo que debo orientar a mi corazón buscar las cosas de arriba, en las cosas espirituales. aquellas que me beneficien para la eternidad.